miércoles, 4 de abril de 2012

Bienvenida y primer asalto: las compañías de ADSL




Bienvenidos/as a este vuestro espacio virtual. La idea de este blog surge de la imperiosa necesidad que todos (me vais a permitir que en aras de la economía literaria obvie el /as que ya sabemos que en masculino los miembros y miembras se entienden como plurales, lo políticamente correcto no deja de ser absurdo en ciertas ocasiones) tenemos de gritar a los cuatro vientos que, aunque nos quieran hacer creer lo contrario, no somos idiotas. Dicho esto os invito a exponer los abusos, engañifas, estafas y tonterías que se esconden en todas esas letras pequeñas que nos rodean día a día. Así que coge tu lupa, que vamos a desenmascararles.

Para empezar que mejor ejemplo que el de las empresas de telecomunicaciones que nos venden servicios por un precio y a la hora de pagar la factura resulta que entre cuotas de línea, alquiler de aparatos (que tú, alma inocente, creías que te habían regalado) y tasas que se sacan de las mangas te duplican y hasta triplican el precio.

Entre los más descarados ONO, que oferta por menos de 20 euros teléfono e internet pero que a la hora de la verdad alcanza los casi 50 euros mensuales. Las ofertas son un engaño, la publicidad capciosa y completamente falsa. Las tarifas reales cuesta encontrarlas pero, por ley, tienen que tenerlas publicadas en la web. Concretamente aquí: http://bit.ly/f6v4Vn.

Jazztel hace tres cuartos de lo mismo, hay que leer muy atentamente las condiciones de contratación (de nuevo y siempre en letra muy pequeña), pues resulta que, para empezar, sólo la cuota de línea cuesta más que la mensualidad (16 la mensualidad, 18 la cuota de línea) http://www.jazztel.com/condiciones-de-promociones-online.

No tengo experiencia directa con otras compañías pero me consta que la situación es muy similar. Con darse una vuelta por los foros encontraréis historias increíbles de los abusos que estas compañías perpetran contra sus clientes.

Protestar, reclamar o darse de baja puede ser toda una odisea. Suelen exigir una compensación por no cumplir con los plazos de permanencia, que si bien son ilegales en nuestro país según la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, la norma deja ciertos vacíos que permiten a las compañías aprovecharse de las causas no previstas según la normativa. (lainformación.com en este blog http://blogs.lainformacion.com/legal-e-digital/2011/11/10/%C2%BFson-legales-los-compromisos-de-permanencia/ lo explica de maravilla)

Aunque resulte tedioso no hay que darse por vencido. Ármate de papel y lápiz cuando llames para reclamar (recuerda que no hace falta pagar un número 900, en  nomasnúmeros900.com encontrarás la mayor parte de teléfonos de atención al cliente que no son de pago) apunta todos los nombres de las personas que te han atendido, así como los departamentos, procura no perder la paciencia (están entrenados para sacarte de tus casillas), mantente firme pero educado y no dejes que te cuelguen nunca. Si tienes un punto de venta cerca es mejor hablar con alguien cara a cara aunque no esperes que te vayan a dar una solución en una mañana.

No renuncies a reclamar y agota todas las posibilidades, acude a la OCU, Facua, al defensor del pueblo, al de los usuarios de tu ciudad (muchas de las reclamaciones se pueden rellenar por internet) Que quede constancia de manera escrita con toda la documentación posible de tu queja. Existen plataformas y foros para afectados por los desmanes de las compañías pero siempre es mejor ir por los cauces oficiales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario